La gestión de proyectos es un arte.
Es como dirigir una orquesta filarmónica para dar un concierto, en donde cada integrante cumple una función tocando el instrumento que le corresponde. Sin embargo, coordinar el orden en la interpretación, indicar a cada miembro que toque el instrumento en el momento preciso, asegurarse que cada uno tenga las partituras de las obras musicales que se van a interpretar, verificar que las sepa interpretar. Además de esto, el organizador, el público y los músicos que asisten al evento tiene claro qué obras se van a interpretar, la fecha del evento, la programación de la presentación y el fin de esta.
Al final, el concierto debe salir a la perfección y el público complacido con la interpretación.
Esta analogía es un reflejo de lo que ocurre al gestionar cualquier proyecto de analítica, debido a que el cliente requiere el conocimiento que le aportan sus datos, para poder tomar decisiones.
En este caso, como para la orquesta, debo contar con un equipo de profesionales idóneos, que puedan ejecutar los proyectos, desde acompañar al cliente a definir sus necesidades, hasta colocar en producción el desarrollo.
Se debe saber qué “instrumentos” tocan los ingenieros y saber cuáles se adaptan de acuerdo con los requerimientos del cliente, por lo que la asignación de estos a los proyectos debe basarse en las herramientas que mejor maneja cada uno.
Se deben coordinar con el “público”, “¿qué quieren oír?”, para esto se realizan reuniones con el cliente para poder entender la necesidad, definir sus requerimientos basados en las necesidades, y así, con el equipo de desarrollo saber qué se debe hacer para cada proyecto.
“La programación del evento” es fundamental para el desarrollo, por lo que se debe definir con el cliente el tiempo que se tomará el desarrollo de su producto, esta es la planeación del proyecto, con ella podemos así definir:
- Fechas de entrega del producto funcional (deadlines).
- Producto funcional: Esta es la mejor medida de progreso en un proyecto de analítica.
- Plataforma o herramienta de BI donde se hará el dashboard.
- La metodología.
- Los canales de comunicación.
- Los roles.
- Las fuentes de información.
- Las fuentes de datos.
- Manejo de los cambios que se presenten durante la ejecución del proyecto, entre otros.
- Puesta en producción del producto.
Con los detalles del proyecto claros, los desarrolladores, podrán saber cuándo entran a “interpretar” las obras de la mejor manera.
En un proyecto lo que se busca es que la comunicación sea lo mejor posible, que todas las partes interesadas puedan expresar sus opiniones, y lo que esperan antes, durante y después del proyecto, ya que, la interpretación y la comunicación efectiva son esenciales para tomar decisiones informadas.
En caso de que el cliente o el usuario solicite que cambien la canción que están tocando durante la ejecución del proyecto, se debe tener en cuenta que, dependiendo la metodología, se pueden incluir nuevos requerimientos antes de “bajar el telón”. Para esto se utilizan aclaraciones o visualizaciones claras y ejemplos concretos para ilustrar lo que se requiere.
En resumen, la gestión de proyectos de analítica comparte similitudes sorprendentes con la dirección de una orquesta, donde cada miembro desempeña un papel crucial para lograr un resultado armonioso. La coordinación de equipos multidisciplinarios, la definición precisa de requerimientos, la planificación minuciosa y la adaptabilidad a los cambios emergentes son elementos esenciales para el éxito en ambos escenarios.

La comprensión de que el cliente es el centro de atención y que sus necesidades guían cada paso del proceso es fundamental. Así como un director musical se esfuerza por satisfacer a su audiencia, en la gestión de proyectos de analítica, la entrega de un producto funcional y valioso es la medida definitiva de progreso. La elección de herramientas y la plataforma de BI, la definición de roles y responsabilidades, y la comunicación fluida con el cliente y dentro del equipo son aspectos críticos que impulsan el proceso hacia adelante.
En última instancia, la gestión efectiva de proyectos de analítica requiere la habilidad de dirigir, colaborar y ejecutar en armonía, logrando así resultados que superen las expectativas. Al reconocer la importancia de cada elemento involucrado y enfrentar los desafíos con determinación, los profesionales de la gestión de proyectos pueden crear sus propias sinfonías de éxito en el mundo de la analítica, dejando una huella duradera en la toma de decisiones y los resultados empresariales.
Desafíos frecuentes en la gestión de proyectos de analítica