Autora: Lorena Sánchez Osorio

Una de las cosas más bonitas y más difíciles que me ha dejado la decisión de emprender ha sido la humildad,

Confieso que he tenido que luchar contra el ego y la soberbia que me dejaba el conocimiento. El año pasado fue un año de crecimiento inesperado, donde la empresa dio su primer brinco pasamos de ser una microempresa a una pequeña empresa y superamos el tan temido valle de la muerte, pero finalizando el año tomé una decisión sabia y me reconocí como una persona que necesitaba ayuda para continuar y allí he tenido diversos asesores.

He tenido asesores para mi salud mental, para mejorar mi salud física, para mi imagen personal y empresarial, para el tono de la comunicación, para una gerencia con propósito, para una gestión humana, MUY humana, también tengo asesores legales y hace poco empecé a preguntar como trabajar en procesos de ventas. Y aunque parece que he tenido asesores para todo debo decir que es cuando más abrumada me he sentido. He tenido que desaprender para aprender y crecer, tengo reuniones y escucho asesores y en una de ellas me pregunté, ¿por qué debo confiar en ellos y no en mi intuición? Y aquí es donde tuve mi momento WOW. Yo me estaba preguntando desde la intuición, ¡cuando he dedicado toda mi vida a los datos! ¡Necesito mis datos para entender lo que me dicen! Definitivamente: casa de herrero, cuchillo de palo.

Cuando empecé a recopilar datos y a usarlos para tomar decisiones, cuando empecé a hacerlos parte de mi gerencia, a hacerlos parte de mi vida, empecé a sentirme más segura. Empecé a usar todas estas herramientas que trabajo con mis clientes en Wadua y mi sensación de seguridad estuvo increíble. Admito que no todo fue color de rosa. En ese cambio de forma de trabajo también perdí parte del equipo que no se pudo adaptar a la toma de decisiones desde los datos y no desde el corazón, pero hoy entiendo que era algo que debía pasar.

Viví lo que mis clientes viven y entendí que el propósito de Wadua era brindar bienestar, tomar decisiones con datos nos dan calidad de vida, nos generan bienestar. 

Hoy agradezco a todos mis asesores y aplaudo de pie a mi equipo de trabajo que han logrado conmigo y con las empresas la sensación de bienestar.

 Hoy apoyo el hashtag: #LaBuenaVidaConDatos

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